Gabriela Solis
editorial@queremoscomer.com
Saudade es una palabra bellísima... e intraducible. Los portugueses la definen como un sentimiento próximo a la melancolía, estimulado por la distancia temporal o espacial de algo amado. Los platillos que la chef María da Silva ofrece en Casa Portuguesa recrean esa belleza, mitigando la nostalgia a través de lo reconfortante que puede ser la buena comida.
Te contamos 8 razones por las que Casa Portuguesa te enamorará:
El “vinho verde” es una variedad con denominación de origen: se produce exclusivamente al noreste de Portugal, en la provincia de Minho. Es encantador abrir apetito con una copa de esta bebida, pues sus tintes ligeramente ácidos preparan el paladar para la comida.
La chef María sabe que el bacalao puede ser un platillo complicado porque: 1) lo asociamos exclusivamente con la Navidad y 2) su sabor es intenso, lo que puede intimidar. Por ello, Casa Portuguesa ofrece platillos con bacalao para todos:
Para el principiante: Bacalao Com Natas - Al estar perfectamente mezclado con ingredientes más familiares, como el queso, la papa y la nuez, le vas perdiendo el miedo al sabor del pescado.
Para el intermedio: Bacalao Gomes de Sá - Este es para quien ya conoce el sabor del bacalao y quiere adentrarse más en él: se desmenuza y se cocina con cebolla, ajo, perejil y huevo cocido.
Para el conocedor: Bacalao Com Grao - Lomo de bacalao asado sobre puré de garbanzo, espinacas y jitomates confitados. ¡Para quien ya le perdió el miedo!
Este nuevo platillo está siendo un éxito en el restaurante: puedes escoger entre verduras, pescado o carne y el fuego mantendrá la comida caliente mientras conversas con quien te acompañe con este delicioso platillo pensado para compartir.
El fado es un estilo de música portugués: nostálgico y profundo no podrás escucharlo sin estremecerte de emoción. Estas noches ocurren los sábados cada 2 semanas, puedes consultar el calendario aquí y una pequeña muestra del fado a continuación:
María da Silva es encantadora. Cocinar le apasiona y eso lo transmite no sólo en sus platillos sino en su conversación. Bromea, se ríe en voz alta con desenfado y atiende agradecida los comentarios de los comensales que elogian su comida. “El cielo es divino, pero tú vives en la Tierra”, dice que es lo que se repite a diario para no volverse uno de esos chefs-divas. Y nosotros se lo agradecemos tanto, ¡tanto!
Si quieres que Casa Portuguesa sea el escenario de un evento especial (desde la presentación de un producto, una junta de ventas, un aniversario o una boda civil),todo lo que tienes que hacer es ponerte en contacto y reservar el segundo piso, qu tiene una vista increíble hacia el Parque Lincoln.
Anteriormente, Casa Portuguesa era más ubicada por sus vinos: sin embargo, de la mano del renombrado mixólogo Khristian de la Torre, han creado una opción de cocktelería increíble. No dejes pasar el Portonic (agua tónica + oporto) y el Carajillo de Beirão.
Los sabores son sutiles y equilibrados, perfectos para terminar una comida de notas intensas e inolvidables. ¿Qué tal terminar con un crujiente de coco y avellana, acompañado de una bola de helado y frutos rojos? Todo acompañado de la luz de la vela que anuncia el comienzo de la noche.
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