Las flores con bellos destellos de color y de gran fragancia, han estado presentes por años en la gastronomía y no sólo para decorar platillos. Pues desde tiempos ancestrales y en diversas culturas, son un verdadero manjar. Ya sea a través de recetas milenarias o en la cocina de vanguardia, pero su uso se hace cada vez más atrevido en las cocinas del mundo.
La idea de escribir sobre las flores en la comida se me ocurrió porque recientemente tuve una comida con unas amigas, en donde probamos unas exquisitas quesadillas de flor de maguey, que nunca habíamos probado. El mesero nos explico que son unas flores muy escasas, pues los productores de pulque suelen quitarlas porque podrían amargar los jugos de la planta. Las pocas que se logran recolectar son limpiadas y después desflemadas para que al cocinarlas sean una verdadera delicia.
El uso culinario de las flores en México y otras culturas, no es una moda –con las flores comestibles- pues el uso de éstas se remonta siglos atrás en diversas culturas como la hindú, la marroquí, la griega, la china y la romana entre otras.
Las flores realmente no son un ingrediente extraño para nuestro paladar, pues desde tiempos prehispánicos nuestra gastronomía ha hecho uso de las flores de calabaza para diversos platillos, las flores de yuca –de racimos blancos- tradicionalmente la preparan capeada; las culturas mesoamericanas tuvieron una gran tradición en el consumo de orquídeas, flores de cacao, y colorín por decir algunas.
La llegada de otras culturas a nuestro país trajo consigo otra gran variedad de flores, llegaron por ejemplo: las rosas, el azahar, y la bugambilia, entre otras. Para elaborar pasteles, postres o vinagretas dulces, todas ellas son muy recurridas. A la bugambilia, recientemente la he probado como vinagreta, aparte con un color magenta muy atractivo que realza en cualquier platillo, por lo que su uso se ha vuelto más atrevido. Otra aportación europea, fue La lavanda, que por su color y aroma es agradable en salsas y cremas.
Los chinos por otro lado, llegaron con los crisantemos –muy empleados en su gastronomía- Si quieres probar un platillo con crisantemos, visita el restaurante Nagaoka que en la orden de témpura podrás probarlo.
En Agapi Mu hay un postre que se llama Pera de Hidra, con almendras y agua de rosas de sabor sutil pero que lo hace muy rico.
El helado de violetas, con un ligero tono lila, y delicioso sabor cremoso además es muy aromático; algunas nieves artesanales, preparan verdaderas delicias con flores.
Usar flores en bebidas es una tradición milenaria. Los chinos por años han empleado el jazmín que además tienen propiedades relajantes, como la manzanilla, la lavanda y las rosas. Pero ahora los cócteles también son decorados con flores tropicales que les da una aire muy coqueto.
Las flores son una muestra más de la riqueza gastronómica que tenemos por descubrir cada que tengamos ocasión. Sin duda nos sorprenderá su presencia. ¿Y tú, cuales has probado?