La cerveza (también) es para mujeres

Al hablar de cerveza, lo primero que deberíamos hacer es dejar atrás el chiché del hombre barbudo que la bebe sin control, con una panza prominente y combina eructos con más y más botana grasosa. Es como superar el estereotipo del mexicano con sombrero sentado bajo un cactus.

A la cerveza hay que verla como lo que es: una bebida nutritiva, llena de vitaminas, proteínas y por supuesto carbohidratos que puede combinarse con cualquier platillo y que es ideal para hombres y mujeres por igual.

Pero es momento también de eliminarel supuesto de que una mujer que bebe cerveza sólo va a elegir una con jarabe de cereza, frambuesa o durazno. Como si les gustara limitarse a las opciones dulces y perderse un mundo muy amplio de aromas, sabores y texturas.

Así que para empezar a conocer el verdadero mundo de la cerveza aquí van una serie de estilos ideales. Comienza por una cerveza ligera. Pide una German Pilsner, donde podrás encontrar algunos aromas de cereales dulces, como de masa de pan, junto con otros florales más discretos. Su sabor estará ligado a esos aromas con un toque ligeramente dulce de inicio, terminando con una sensación más seca y un poco amarga. Debería ser refrescante y acompañarse bien con mariscos o ayudar a cortar la grasa de algunas carnes.

Si te pareció muy amarga, prueba con algo más dulce. Consigue una Blonde Ale, que también es ligera y refrescante, pero más orientada hacia los sabores de los cereales sin ese final amargo que pudo costarte trabajo en la anterior.

Ahora bien, si buscas algo un poco más diferente a lo que has probado antes sin ser demasiado atrevida, intenta con una English Brown Ale. En ésta notarás un color entre ambarino y marrón, lo cual nos indica que utilizaron cereales más tostados. Por lo general podrás encontrar aromas de nueces, caramelo y quizás un poco de frutos secos como pasas. Al probarla sentirás mayor textura en boca, encontrarás sabores dulces de los cereales y puede recordarte unas galletas, nueces, caramelo e incluso a un café ligero.

Pero si te quedaste con ganas de algo más amargo, lo tuyo puede ser una India Pale Ale. Son cervezas con mucho lúpulo que las vuelve muy aromáticas y amargas, aunque la percepción amarga dependerá de su balance con los cereales. Sus aromas pueden variar mucho, pero normalmente son intensamente cítricos, frutales y a veces herbales, como de pasto recién cortado o un bosque de pinos. Dale un trago. Quizás el inicio sea un poco dulce, incluso como caramelo, pero prepárate para un golpe amargo al final que te durará un buen rato en el paladar.

Para las amantes del café y el chocolate, prueben con una Porter o una Stout. Son dos de los estilos de cerveza con tostados más intensos en los cereales, por lo que su color va de marrón a negro y sus aromas característicos son justamente de café y chocolate. Las Porter son un poco más ligeras que las Stout, pero en ambas debes encontrar cervezas con mucho cuerpo, muchas veces cremosas y densas. Son deliciosas en tardes frías o lluviosas y con postres.

Si ninguna de las cervezas que probaste fue completamente de tu agrado, prueba los mismos estilos pero intenta con diferentes cervecerías. Puede haber grandes diferencias. La clave está en no darse por vencida y buscar otros estilos, puedes llevarte sorpresas agradables.
Si tu idea es sumergirte en el verdadero mundo de la cerveza, en mi opinión, tu último recurso debería ser una con jarabe de fruta, pues en realidad son más un coctel que una cerveza.

Por último, un recordatorio: sírvelas siempre en un vaso de vidrio. No sólo para apreciar sus tonalidades, también para desprender parte del gas disuelto y detectar sus aromas más fácilmente. Suerte en la búsqueda.