Gloutonnerie

La Gloutonnerie tiene su origen en una pequeña tienda delicatesen donde los fieles clientes disfrutaban de las exquisitas creaciones del propietario. El proyecto creció y ha tan sólo unos pasos del local original se estableció el restaurante Gloutonnerie sobre la avenida de Campos Elíseos. Su propuesta es clara y sencilla, basada en lo más tradicional de la cocina francesa.

Marco Cooley –propietario y creador del concepto- rescata ingredientes  y recetas de antaño, de hecho un tanto olvidadas hasta por los mismos franceses. Cooley es un apasionado de la historia y la investigación gastronómica, que ha surgido de recetarios y antiguos libros de cocina adquiridos en todo el mundo en incontables viajes aunados a su memoria gastronómica de su infancia. Por ello cuando nos propone la tradicional sopa de cebolla Soupe à l’oignonsu sabor es acentuado por el antiguo queso comté.

La espaciosa casa que alberga al restaurante permite un juego de ambientes, que inicia desde la barra, el salón principal adjunto a una cava privada, y siguiendo hacia arriba por un salón para fumadores. Termina en la agradable terraza con chimenea donde indudablemente las veladas son acogedoras. El buen gusto de Cooley es evidente en cada rincón de la casa, pues con una decoración atemporal, ciertos elementos vintage le dan calidez al entorno en el que predominan los colores neutros. Uno se siente como en la sala o biblioteca de la casa de un amigo, situación que también propicia el personal con una atención muy esmerada.

Durante la comida nos agrado mucho el servicio, el pan artesanal y sobre todo el sabor de los platillos. Al igual que la Sopa de Cebolla, la Crema de Mejillones al azafrán es muy buena opción, pues es sabrosa y de buena consistencia. Hay variedad de risottos, destaca en particular el de mariscos –con jugosos camarones y calamares- recomendamos también el Cordero al Lechal, el Cerdo Corobuta y las Costillas de Cordero sobre arroz salvaje. Todos los ingredientes son de primera, y respetan perfecto los tiempos de preparación.

Es casi imposible no cometer algún exceso en Gloutonnerie porque todo se antoja, procura llegar al postre porque son exquisitos. Te recomendamos la pequeña Tarta Tatin con helado de vainilla, el flan casero con caramelo o deliciosa tarta Clafoutis con cerezas, todo un clásico. El servicio es de primera, así que estamos seguros que la pasaras realmente muy bien.