Vinos mexicanos de pequeñas bodegas para celebrar a nuestro país

Si hay algo que debe celebrarse en nuestro país es a su gastronomía, no sólo es símbolo de aquello que nos une pero que también nos enorgullece. De costa a costa, México ofrecerá siempre algo maravilloso para aquel que lo busque y se deje sorprender.

Por ello, es que buscamos ofrecerte un brevísimo listado de vinos mexicanos que debes probar estos vinos de productores pequeños que están haciendo algo distinto por no sólo continuar posicionando a nuestro país en el mapa mundial enológico, si no que lo están haciendo de manera sobresaliente por su calidad. Échale un ojo y ponlos en tu radar y bébelos en tu noche mexicana de celebración por un país que construimos todos los días, a pesar de las circunstancias.

DATUM, Quinta Monasterio

Originarios del Valle de Guadalupe, se trata de una pequeña bodega cuyo nombre hace referencia a los inicios de la cultura del vino, cuando los misioneros llegados de Europa trajeron consigo los conocimientos para cultivar la vid y producir el preciado líquido. Aunque comenzaron siendo productores de uva desde 1963, es hasta 2006 que elaboran sus propios vinos y los lanzan al mercado con uvas Cabernet, Merlot y Tempranillo a la antigua usanza combinando alta tecnología enológica.

DATUM se trata de un tinto mitad Cabernet y mitad Grenache con 4 meses en barrica. De color rojo profundo, es limpio y brillante con un cuerpo medio. En su gama aromática predominan los frutos rojos jóvenes, algunas notas mentoladas y de eucalipto; ligeros recuerdos de pimienta y notas sutiles de vainilla y coco. En boca es frutal y con una acidez agradable; ideal para acompañar con comida mexicana, y ate con queso.

Cabernet Montepulciano, Villa Montefiori

Paolo Paoloni es un italiano que se enamoró de México a primera vista, por eso decidió hacer su propia bodega pero teniendo siempre un paso en su país natal al vinificar cepas italianas. La sinergia entre la tradición italiana, el conocimiento adquirido a lo largo de los años, el acceso a la alta tecnología en combinación con la gran tierra del Valle de Guadalupe, alcanza la máxima expresión con los vinos Montefiori.

Este vino tinto está hecho con 80% Cabernet Sauvignon y 20% Montepulciano, con 12 meses en barricas de roble francés de 2do uso. Es de color rojo intenso; con notas claras a frutos rojos, arándanos, fresa, pimientos, aromas ahumados y tostados. Se recomienda acompañarlo con prosciutto y melón, queso brie y pasta.

Cosechera, Bodega de Pago de Rodríguez

Se trata de viñedos de Tempranillo de 10 años y Cabernet Sauvignon de más de 30 años, localizados en el Valle de Guadalupe. En los ejidos de El Porvenir y Fco. Zarco se elaboran vinos de alta expresión, con vivaz color en los hollejos que expresan la naturalidad del terruño, gracias a una agricultura consciente del medio y consumidor libre de químicos y abonos provenientes del petróleo u laboratorios de agroquímicos.

Cosechera es un vino blanco con uva Chardonnay sin reposo en barrica de color brillante como sus ojos y dorado como su piel. Sus aromas son un recuerdo de flores, frutas maduras con elegantes tonos de especias que no llegan a opacar su frutalidad. En boca tiene aromas tostados y delicados sabores. Se recomienda acompañar con camarones o calamares a la plancha, pescado a las brasas o a la sal.