El cuarto jueves de noviembre, en un ambiente prenavideño se da una de las celebraciones más populares de Norteamérica, el THANKSGIVING, que festeja el Dar Gracias a Dios por todo lo bueno que nos da, rodeados de un espíritu de bendiciones y buenos deseos.
Esta tradicional fiesta contempla un banquete de deliciosos platillos, que empezó como una fiesta de cosecha, es por eso la relación con la comida y los alimentos. La historia de su origen inicia en el año 1620, cuando el barco Mayflower que transportaba a un grupo de separatistas religiosos ingleses, que se les llamó Peregrinos, llegaron del viejo continente a lo que se denomino el Nuevo Mundo, América, este grupo de peregrinos se instalaron en el estado de Massachussets, en Estados Unidos.
La temporada de invierno para ellos fue realmente difícil y sorpresiva, estuvieron en condiciones climáticas duras, que hicieron que algunos murieran al pasar hambre y frió; sin embargo poco tiempo después, durante el otoño fueron ayudados por los indios, de quienes aprendieron a cultivar alimentos como el maíz, incluso también aprendieron a cazar y a pescar, razón por la cuál al año siguiente tuvieron una gran cosecha de grano, cebada, frijoles y calabazas. En agradecimiento a esto, los peregrinos invitaron al Gran Jefe Indio y a su tribu a un festín, los indígenas llevaron carne de ciervo, pavos y palomitas de maíz; mientras que los peregrinos prepararon diferentes tipos de granos y cocinaron arándanos.
Sin embargo, existe una controversia al respecto, porque se dice que después de este festín los peregrinos tomaron las tierras de los indígenas, de quienes prácticamente aprendieron como sobrevivir.
En los siguientes años se continúo con la festividad, pero fue en 1789 cuando el presidente George Washington lo proclamo “Día Nacional de Acción de Gracias” y en 1863 se declaró como una “Fiesta Nacional” por el presidente Abraham Lincoln.
En la actualidad es común que este día se festeje en familia, con bendiciones durante el banquete, el cuál consiste en deliciosos platillos, como el Pavo Relleno, la Salsa de Arándano, las Batatas, el Pan de Maíz, las Judías Verdes y el muy popular Pastel de Calabaza.
Se suele bendecir la mesa diciendo: “Bless this food, oh Lord. Thank you for your many blessings, this Thanksgiving” (Bencide estos alimentos, Señor. Gracias por tus muchas bendiciones este día).
Ese día durante la mañana es común ver los tradicionales desfiles por televisión. Por la tarde, después de disfrutar de todos los alimentos, la familia reunida se divierte viendo los partidos de Fútbol Americano.