Dolce Amore, el secreto mejor guardado del centro de Tlalpan que queremos gritarle al mundo

Una de las zonas más antiguas y tradicionales de nuestra ciudad es el centro de Tlalpan. Esta colonia sureña de calles empedradas, casas y conventos antiguos era donde Porfirio Díaz y Carmelita Romero pasaban los fines de semana. Hoy en día Tlalpan sigue teniendo esa "onda" bohemia/pueblerina donde las calles son angostas  y casi todos los comercios pertenecen a  gente con oficios como: el panadero, el zapatero, el carpintero etc.  Muy parecido a San Miguel de Allende. Justamente en la calle de Congreso casi a espaldas de La Universidad Pontificia de México es donde se encuentra Dolce Amore, uno de los restaurantes italianos más agradables y ricos en el D.F.

Ambiente
La fachada de Dolce Amore es patrimonio histórico y cultural de México por el INAH, muy característica de las construcciones del S. XVII.  Al Entrar te vas a dar cuenta de un pizarrón hecho con técnica de puntilleo, la cual es la que usó Miguel Angel, las ventanas abiertas con barrotes de hierro forjado le dan una frescura a todo dar en verano y otoño. De día esta buenazo para ir un sábado con la familia a recorrer la zona y acabar comiendo ahí, de noche es ideal para la cena romanticona y es que cuando llega la noche bajan las luces, sacan las velitas y el ambiente se convierte en algo muy romanticón. Vinito, unas entradas, un postre para compartir y seguro conquistas hasta al "William Levy"

¿Qué me comeré y beberé en Dolce Amore?
En cuanto a comida, te podemos decir que Dolce Amorees el tipo de lugares que sobrepasan las expectativas del comensal, el chef usa técnicas italianas clásicas, combinadas con solo lo mejor de producto ¡No falla! Algo que podemos notar es la gran variedad de cervezas internacionales como alemanas como la Paulaner, argentinas como la Quilmes, Irlandesa como la Guiness y obviamente mexicanas también.

Primero lo primero.
De entrada en Dolce Amore pide las Fiori di Zucca. Crujientes flores de calabaza, rellenas de queso de cabra, con un saborcillo a salvia y orégano frescos. Las capean con un estilo tempura así que tiene un contraste buenísimo entre lo crujiente por fuera y lo suave del queso por dentro, funciona a todo dar. Vienen sobre un aderezo cremoso de chipotle ¡Demoledor! Va de lujo con un prosecco.

Lo que sigue por favor.
Pura frescura y sabor te vas a encontrar si pides la Insalata Nonna que es una mezcla de berros y espinaca al la cual para balancear el sabor le ponen un poco de manzana fresca, piñones bien tostados, aderezo de miel y mostaza perfectamente bien emulsionado que le da ese sabor entre dulce y fuerte de la mostaza Dijon. Para rematar, la ensalada viene con un poco de tocino que le da el toque salado y crujiente.

El fuerte.
Aquí hay dos suculencias que recomendar, la primera es:  El Nero di Seppia Veneziano que es un fettuccine con tinta de calamar hecho  desde cero en Dolce Amore , acompañado de camarones perfectamente limpios, cocidos y sazonados; albahaca fresca y laminas de parmesano. Tiene ese saborcillo a ajo y un sutil toquecillo picante de peperoncino ¡increíble! La pasta totalmente al dente, suavecita por fuera y firme por dentro, la tinta de calamar combinada con la harina le da un sabor salado a mar. ¡Excelentemente bien logrado!

El segundo platillo fuerte que no te puedes perder es: la Gallina Ripiena al Forno. Un pollito de leche relleno con un ragú de frutos secos como nuez, piñón etc. Viene presentado entero y bañado en una muy bien reducida y brillante salsa de vino tinto. Al partirlo puedes ver la carne blanca, tierna  y bien jugosa. Trae de guarnición unas verduras al glill muy al dente y esto lo logran blanqueándolas en agua hirviendo y luego en la parrilla.

Para rematar.
De postre Dolce Amore tiene una suculencia llamada Gelato Di Meringa que básicamente te va a hacer el día o la noche. Un merengue helado bañado en una salsa de frutos rojos que le da ese sabor cítrico y dulce a la vez. La felicidad hecha postre.

Cabe mencionar que Dolce Amorees un restaurante atendido por sus dueños Dulce y Federico, un matrimonio muy chambeador que siempre están "Al Ojo Del Amo", esto hace toda la diferencia en un restaurante ya que siempre están pendientes de que salgas contento y créeme que así va a ser. En hora buena por mexicanos como ellos.