El personal de la cantina trata mal al cliente. Probablemente piensan que lo pueden hacer por la elevada demanda de mesas. Regañan, llaman la atención. Si quieres platicar con alguien, ve a otro lugar, el mariachi no te lo permitirá. Comida promedio, nada extrairdinario. Precios altos
si deciden ir, no lleguen con hambre, se tardan demasiado en dar una mesa. Y si te pasan a barra se olvidan de que estabas en la lista de espera. Además de que te dicen Usted es privilegiado por estar en la barra tomando y no en el sol esperando. Vaya tipos tan groseros!! Y confirmo si hay un gordo nefasto en la puerta.
Un tipo asqueroso en al entrada con un pesimo trato. Con todo y reservaciòn y lugares dentro te frenan para tener gente afuera y que parezca lleno. El servicio dentro pésimo y lento. Urge una capacitación a todos