Fue muy mala nuestra experiencia en Saks Tlalpan, dos platillos fueron de muy mala calidad. Lo notificamos y se notó una indiferencia tremenda y solo dijeron "le aviso a mi gerente" mismo que nunca se presentó. Al pagar volví a mencionar la mala calidad de los alimentos y volvieron a decir "ya le dijimos al gerente, ahorita viene" 15 a 20 minutos después solo se paseo frente a nuestra mesa. Nos levantamos para irnos al ver que no les interesaba hablar con nosotros y el famoso "gerente" solo atinó a llevarme mi factura y más nada, no le importó nuestra queja, dijo que a habían probado y que estaban bien. Al ver que me retiraba molesta se acerca otro ejecutivo argentino y solo aparenta interesarse porque al igual que el mexicano tampoco le dio importancia al asunto. Fue desagradable constatar que no les afecta desprestigiar su marca. NO LO RECOMIENDO!!