las porciones son raquiticas, como de pais con hambruna y eso que mi promocion decia menu completo, pero para un indigente, por 2 linonadas y 2 copas de vino (de 35 ml y 50 ml) acabe pagando $350.00, la propina te la clavan en automatico sin preguntar. No recomendable.
He tenido la mala suerte de conocer este sitio. No
recuerdo cuando fue la última vez que vi una carta
de vinos tan pobre (vinos comerciales) a precios tan
ridículos (me sentí por unos segundos transportado
a Manhattan). La comida es 2-3. La supuesta vista
es una farsa, y el ruido de la avenida le quita a uno
el apetito. Eso si, el servicio fue muy atento y por
ello se auto-evaluaron con un 15% de propina
automático.
Buen servicio sin embargo la comida es
de mediana calidad y lo peor es que te
engañan con la bebida te cobran por por
separado el mezclador y cuando solicite
una aclaración el encargado del
restaurante de forma poco amable me
informa que "así es en New York y Paris"
me parece de muy mal gusto !!!