El lugar es una casa vieja y fría cuyas mesas en el pasillo y en los salones te hacen sentir encerrado. El servicio es terrible. El menú es pobre. Es increíble que la que se hace llamar chef de éste lugar no sepa o le de flojera hacer una salsa, todo es con mantequilla y queso, según el mesero que porque es lo más saludable (¿!!!?). Se tardaron 50 minutos en traer la comida. ¿Platillos de $400 - $600? Si fueran celestiales los pagaría pero no valen la pena. NO VAYAN. ES UN ROBO.
El servicio deja mucho que desear, es muy desagradable llegar Con Reservacion! y que apenas te prendan las luces y arreglen la mesa diciendo que es una zona que no usan... no es la primera vez... es una lastima... no volveré
El servicio que recibes desde los meseros, hasta en el cocina cuando algo no fue de tu agrado no va acorde con la imagen que desean vender del restaurante. No hay coherencia entre la imagen deseada y la real. El precio no vale lo que es. Hay lugares con mucho mejor servicio, calidad y sabor que valen mas la pena visitar
Es un excelente restaurante, las instalaciones son muy bonitas, la decoración podría se mejor (en gustos se rompen géneros),pero la comida es espectacular, se nota que hay una verdadera cheff detrás de la cocina que sabe de comida italiana. Desde la carta y los ingredientes se puede notar.
Había escuchado mucho de este restaurante, pero desafortunadamente ayer que estuve ahí me pareció que está sobre valuado. Nuestros platos principales no fueron realmente espectaculares. Lo que sí puedo decir es que el postre delicioso y el pan que dan al principio con el aceite es muy bueno. Entre otras cosas, no quedamos satisfechos con el servicio. Nos sentaron en el salón de la planta alta y el mesero que nos atendió fue un tanto petulante.
eligi el Rosetta para festejar mi cumple!
El lugar no me gusto, muy frio la gente amontonada, la comida mas o menos,compartimos varios platillos para probar de todo,no gran cosa lo que mas me empacto fue la milanesa ke en todo el mundo se conoce como impanizada y servieron una carta salseada y pues bueno la pasamos bien, pero´al final pidieron el pastel con vela, rico mejor ke todo lo de mas pero´aparece en la cuenta y fue´un postres de lo mas caro!
Esperienza de no regresar!
Para empezar, el ambiente es excelente, hay
una terraza que aprovecha a lo máximo la zona.
Ahora, la parte más importante, la comida: Todos
los platillos son deliciosos, hechos con cuidado,
novedosos, (siempre conservando la tradición
italiana) de perfecta presentación y tamaño.
En resumen, el lugar es perfecto para cualquier
grupo de personas o pareja, y excede
expectativas incluso en su rango de precios.
Recomiendo: pedir al centro y compartir, ir
temprano y pedir reservación, y probar todo!