La tecnología nos salvará del hambre

Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO),para 2050, la producción de alimentos tendrá que aumentar un 70% para evitar una hambruna en la población mundial que alcanzará, según estudios, los 9,000 millones de habitantes.

El problema es que la tierra disponible para producir alimentos no alcanzará para cubrir las necesidades y que la mitad de lo que hoy se produce de comida —cerca de dos mil millones de toneladas— se desperdicia, según la Institution of Mechanical Engineers (Institución de Ingenieros Mecánicos) con sede en Londres.

Para mejorar el panorama y contribuir a las soluciones de los problemas que se avecinan, la tecnología de análisis de datos es clave, pues puede transformar la producción de ciertos alimentos, como el de leche y carne.

Así lo ve la empresa texana Vital Herd y desarrolló un dispositivo innovador que monitoriza el estado de salud del ganado, para evitar las muertes por enfermedades o las pandemias que contribuyen al desperdicio de comida —según el Departamento de Agricultura de EE.UU., las pérdidas totales por la enfermedad y la muerte de animales son de más de 5,000 millones de dólares al año—.

Se trata de un sensor que las vacas pueden tragar sin afectar su salud. Este dispositivo recoge información sobre el animal, como la frecuencia cardiaca, la temperatura, los distintos niveles químicos, etc. y la envía de forma inalámbrica a receptores vía internet, con el fin de que sea analizada por el hombre. Además, este sensor envía alertas en caso de existir alguna complicación en la salud de las vacas.

Los análisis de grandes cantidades de datos también pueden mejorar los rendimientos agrícolas y ayudarles a los agricultores a tomar mejores decisiones sobre cuándo plantar y cosechar sus cultivos.

Quizás no es la solución absoluta, pero sin duda contribuirá a optimizar la producción de alimento que nuestra monstruosa sociedad mundial necesita. El dispositivo estará en el mercado a finales de este año.